Con la llegada del frío no hay nada mejor como estar a gusto en casa con un sistema de calefacción eléctrica. ¿Estás pensando en comprar uno de estos equipos? ¿Buscas un sistema de calefacción eléctrica de bajo consumo? No te pierdas este artículo de ECO-DE. Te contamos cuáles son las claves que deberás tener en cuenta para elegir el equipo de calefacción adecuado y te damos una selección de modelos recomendados. ¡Allá vamos!
Cómo elegir el sistema de calefacción adecuado
A la hora de escoger un sistema de calefacción eléctrica es esencial tener en cuenta diversos aspectos, así como el calor necesario, el nivel de protección, la seguridad y los niveles de potencia.
Para saber cuánto calor puede proporcionar el equipo y qué cantidad de calor necesitamos para mantener una temperatura adecuada en la habitación, son varios los factores que influyen, así como la dimensión de la estancia, la orientación, el nivel de aislamiento y el clima de la zona en la que nos encontremos. Siguiendo las directrices del Código Técnico de la Edificación en España, con sus coeficientes y cálculos, podemos obtener un cálculo aproximado de la potencia térmica necesaria para un uso doméstico con esta fórmula: Potencia (W) = Dimensiones x Orientación x Aislamiento x Zona climática x 85
Si buscamos un calefactor portátil, son diversos los factores que deberemos tener en cuenta. Uno de ellos es el nivel de protección, especialmente si se van a usar en zonas como la cocina o el baño, donde será conveniente un calefactor con protección ante salpicaduras.
Otro aspecto crucial es la seguridad del calefactor. Los modelos más seguros son aquellos equipados con un termostato que no solo permite ajustar la temperatura deseada, sino que también puede apagar el dispositivo en caso de sobrecalentamiento.
También resulta fundamental verificar si dispone de un selector de potencia eléctrica de uso sencillo, que efectivamente ofrezca la posibilidad de seleccionar entre diversos niveles de potencia.
Una alternativa al adquirir un calefactor portátil es considerar un modelo de última generación con capacidades de conectividad a Internet y funciones inteligentes como los radiadores de bajo consumo de ECODE. Esta elección ofrece ventajas significativas para el control del clima en el hogar. Se pueden utilizar asistentes virtuales como Alexa o Google Assistant para encenderlo, apagarlo o ajustar la temperatura. En algunos casos, la geolocalización del smartphone puede activarlo antes de llegar a casa, optimizando así el consumo y logrando una mayor eficiencia energética.
Tipos de calefactores de bajo consumo
Podemos encontrar una gran variedad de modelos de calefactores de bajo consumo y cada uno de ellos está diseñado para cubrir las necesidades térmicas de una o varias habitaciones.
Calefactores para mesa camilla
Encontramos distintos modelos de calefactores para mesa camilla diseñados para encajar debajo de la mesa camilla y ofrecer un calor adecuado.
Brasero eléctrico
Braseros eléctricos como este, forman una excelente opción para controlar el frío gracias a las diferentes posiciones que ofrecen para regular el calor. Además, son seguros y eficientes en el ahorro de energía. Encontrarás opciones de resistencia entre 400 o 900 w, para que puedas elegir según las necesidades térmicas que tengas.
Lorito eléctrico
Si tienes una mesa camilla y hay pocas personas alrededor, el calentador eléctrico es la elección perfecta debido a su eficiencia energética. Proporciona un calor continuo y equivale a una resistencia de brasero de 400-500 w. Su desventaja es que al no tener termostato, hay que desconectarlo de forma manual en caso de que dé mucho calor.
Radiador de aceite mini
Si tienes peques en casa, un radiador de aceite mini puede ser una buena opción para colocarlo bajo la mesa camilla, pues aguante bien el roce de objetos, de manera que son la alternativa más segura para evitar quemaduras. Puedes elegir entre distintos modelos, con potencias que van desde los 600w hasta los 900w. Disponen de termostato y son menos abrasivos al contacto. También es una buena opción para disponer bajo el escritorio mientras trabajamos.
Calefactores para trabajar sentados
Los calefactores para trabajar sentados proporcionan una solución esencial para mantener la comodidad en entornos de despacho o estudio durante los meses fríos. Con su diseño eficiente y compacto, son ideales para mantener una temperatura agradable mientras se trabaja sin necesidad de calentar todo el espacio.
Radiador cuarzo de pie
Estos radiadores tienen el tamaño perfecto para calentar el cuerpo de cintura para abajo y se pueden colocar en cualquier sitio. Tienen un consumo máximo de 800w. Además, vienen con un sistema antivuelco y en caso de caídas se desconectan.
Calefactor de cuarzo con soporte de pie
Se trata de otra opción para mantenerse calientes en un estudio con una altura menor que el radiador de cuarzo de pie y con un gasto mayor, pues su consumo es de 600 w por cada barra. También viene con sistema antivuelco.
Calefactores para amplias estancias
Los calefactores para estancias amplias son ideales para calentar eficazmente espacios grandes como salones y áreas de reunión, distribuyendo el calor de manera uniforme y manteniendo un ambiente acogedor en toda la habitación.
Radiador de aceite
El radiador de aceite tomará un tiempo para calentar la sala gradualmente debido al calentamiento progresivo del aceite. Sin embargo, al apagarlo, disfrutarás de calor residual a medida que también se enfría de manera gradual. Tienes modelos para elegir de entre 7 elementos con 1500w, 9 elementos con 2000w y 11 elementos con 2500w. Todos los modelos incluyen termostato y ruedas para poder desplazarlos con comodidad. Al igual que los radiadores mini, son una opción segura para evitar quemaduras.
Radiador halógeno de 3 temperaturas
El radiador halógeno calienta la estancia al instante de encenderlo. Además, integra barras halógenas que iluminan además de calentar.
Cada barra proporciona 400W de potencia, y normalmente una sola es suficiente cuando se coloca cerca de nosotros. Pueden ajustarse de forma independiente, lo que es útil para regular la altura de emisión de calor deseada. Además, cuenta con una función oscilante horizontal para una distribución más uniforme del calor y un sistema antivuelco que se desconecta automáticamente si se cae. Estas características hacen que sea una excelente elección para calentar espacios grandes, ya que combina potencia, iluminación y seguridad.
Termoventilador split
Estos termoventiladores de aire están diseñados para su montaje en la pared, lo que les permite distribuir eficazmente el calor desde una posición elevada y calentar rápidamente gracias a su emisión motorizada. Incorporan un termostato y un mando a distancia con programación automática de apagado, lo cual es beneficioso para evitar olvidos y asegurar un apagado conveniente.
La desventaja principal es que es una de las opciones que más consumen, aunque siempre puedes reducir la potencia a la mitad, es decir, 1000w.
Calefacción para el descanso
Si buscamos una calefacción para el descanso, la manta eléctrica es el aliado perfecto. Es una opción perfecta para calentar la cama antes de dormir, para aportar un extra de calor a una articulación convaleciente o para arroparte en el salón y entrar rápidamente en calor.
Calefacción para el baño
Si buscamos una calefacción eficiente para el cuarto de baño, podemos optar por dos opciones.
Termoventilador eléctrico
Si necesitas una calefacción portátil que puedas trasladar cómodamente, te recomendamos el termoventilador de aire. Es compacto y ofrece un calor instantáneo. A pesar de su consumo de energía (1000-2000W), su uso en el cuarto de baño suele ser breve, y generalmente, la primera potencia es suficiente para calentar el espacio.
Calefactor de cuarzo para colgar
En el baño, los radiadores de pared son la opción más conveniente de calefacción. No molestan y se encuentran alejados de salpicaduras. Las barras de cuarzo requieren un poco más de tiempo para calentarse, pero basta con encenderlas 10 minutos antes de entrar al baño.
¡Y esto es todo! Como ves, la clave está en conocer qué tipo de calefacción se necesita para cada estancia y en darle un uso correcto.